Rupturas y duelo dentro del BDSM

Sé que las pérdidas son todas distintas y subjetivas, pero también sé que hay puntos en los que se parecen. Se me ocurrió pensar en el dolor ante la pérdida de un relación BDSM, muy poco e habla del el dolor emocional que pueden causar estas relaciones, y a pesar de ser un tema que ya había redactado, creo que es tan amplio y variado que se debe volver a destacar.

Aunque las relaciones BDSM son diferentes a los vainilla en más cosas que lo explícito de la relación Dom/s, y la interacción sexual, los niveles de confianza son superdotados, maximizados y más entrañables, así mismo los códigos conductuales y la complicidad que ambos generan se vuelven en ocasiones un pesado lastre difícil muchas veces de superar de manera rápida y sobre todo indolora.

Las relaciones D/s como muchas nacen, crecen, florecen, y algunas de ellas terminan por agotamiento de la propia relación, por diferentes objetivos de ambas partes, por la falta de atención, e incluso por la caída en la desagradable rutina. Y cuando cualquiera de esas opciones sucede parece que somos incapaces de reconocerlo, de hablarlo, e incluso de afrontarlo; pues lo que seguirá después de todo será aún más difícil, y es bastante irónico, cuando el diálogo y la confianza son una de las bases primordiales de toda relación D/s.

¿Y qué pasa cuando todo termina? ¿Qué pasa con los Amos y las sumisas tras el fin de la relación? En algunos casos algunos siguen creyendo que esa persona les pertenece, o siguen perteneciendo a ella, y es aquí donde me refiero a que los vínculos son tan fuertes que no siempre son fáciles de romper. Terminar una relación siempre es doloroso, pero es preferible una buena y estable relación a una mala compañía, y si la honestidad entre ambos es grande y directa la mejor forma es afrontar la ruptura inminente, pero más aún el duelo en ambos casos. Muchas de las veces seguimos aferrándonos a causas que no tiene remedio ya, y en vez de sanar, nosotros mismos seguimos dañándonos de matera brutal. Buscamos el contacto constante, evocamos momentos pasados, buscamos “coincidir casualmente” en lugares, tiempo y espacio que igual en ningún momento habíamos visitado, nos convertimos en ocasiones en acosadores más que en personas, y eso genera que la otra persona pierda completamente la confianza y si hubiese la posibilidad más delante de entablar una amistad cordial, con estas estupideces terminamos por ser lo que nadie quiere cerca.

Entonces pregunto ¿Cómo gestionar el fin de una relación D/s? ¿Es posible una amistad tras la ruptura o es mejor cortar todo tipo de relación? La mejor gestión es la verdad, no podemos permitir dañar a alguien que en su momento fue o es importante para nosotros, y aunque el dolor es inevitable, estamos conscientes de que lo mejor para ambos era dar fin a dicha relación. Llevar un periodo de duelo ayuda, extendiéndose el tiempo que crean que necesitan, y comenzar a deshacerse de todo lo que vincule a esa persona contigo, permitirte madurar y sanar sin forzar las cosas, sin caer en el arrebato o en lo insano porque contrario a lo que todo mundo diría, nosotros mismo sabemos cunado estamos cruzando ese límite de lo normal a lo insano absolutamente.

En mi opinión puede haber una amistad post- relación, SI.

Si ambos tienen la madurez, y después del duelo podría darse una amistad aún más entrañable de las que solemos tener en la vida vainilla, se puede y yo conozco parejas que lo han logrado.

Otra de las muchas causas y la que más daño genera (y demasiadas veces es factor de que la relación termine) son los silencios y la ausencia y/o desaparición de la otra persona, y es que en verdad no entiendo, ¿tanto nos cuesta reconocer que ya no deseamos continuar con la relación?, el recurrir al truco de desaparecer por periodos larguísimos, o los descalificativos en este caso a la parte sumisa, por el simple hecho de no afrontar que el interés ya no es mutuo, y solo seguir generando más ilusión es lo más vil viniendo de Amos o de sumisas tiene el mismo calificativo. Y a la larga es lo que más daño y herida causan, y en muchas ocasiones las más difíciles de superar; pues genera un sentimiento de traición.

Pero ¿Por qué nos cuesta tanto un adiós? ¿Por qué nos cuesta tanto afrontar una ruptura? Pues muy simple, porque no estamos educados para ello, ni en la vida vainilla ni en el mundo BDSM: pero al final e inevitablemente pasa, todo acaba una y empieza otra vez, es un ciclo que se debe seguir en todos los aspectos pues aunque hay relaciones que se establecen por muchos años, al final siempre hay una separación sea cual sea la circunstancia, esa es la auténtica realidad. Y cuando pasa lo mejor es no mirar para atrás; y seguir por un tiempo en la soledad, cortar comunicación mientras las heridas sanan, y en lo que hay que decirlo el corazón sana y vuelve a fortalecerse. Así sin más ni menos, dejar las tonterías, y sobre todo el comportamiento de niños. Todos sufrimos dolor emocional, todos pasamos por las rupturas pocas o muchas pero es así, al final de todo se aprende, y todo se puede utilizar para crecer como persona y porque no también como sumisa.

Dejar de pertenecer no es dejar de querer hablando específicamente de las relaciones BDSM, se puede seguir queriendo a esa persona por lo que nos ha aportado y desearle el mejor en los nuevos caminos, eso nos ayuda a crecer, a madurar como personas, y es que estamos tan acostumbrados (o nos han enseñado) a utilizar el rencor, el chantaje, y el dramatismo mal enfocado (pues puede enfocarse en la sanación), como un mecanismo de defensa cuando algo o alguien deja nuestras vidas e inicia un camino diferente.

Se cometen muchos errores pensando que estamos en lo correcto, cuando la solución está en la honestidad, el poner siempre las cartas sobre la mesa, y así cada uno saber que juego es el que jugaran y sobre todo que tipo de relación llevaran.

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7 respuestas

  1. Hace varios meses que mi amo fantasma nunca estaba pero me hizo sentir la persona más feliz siendo su propiedad, se fue y no consigo dejar de sentirme suya. Otra sumisa anterior fue más fuerte y me destrono de sumisa verdadera. Esta siendo muy duro llevo su marca en mi piel me he quedado sola y tal vez más adelante quede una amistad pero he roto todo contacto para poder sanar. Gracias por tu publicacion

  2. Si. Es tal cual. Todas las relaciones llegan a su fin. No importa la causa. Ejemplo un viudo. El problema es q las relaciones bdsm son mas intensas y yo sumisa sigo extrañando a mi amo, a tal punto q pense en enviarle un email para tener una relacion fuera del contexto q teniamos y no lo hice. Hay q dar vuelta la hoja. Gracias!!

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